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Las familias desahuciadas ya pueden solicitar su hospedaje en los Padres Paúles

Los vecinos que se encuentren en situación de desahucio ya pueden acogerse al acuerdo que les permitirá residir en los Padres Paúles durante un tiempo determinado, gracias a la colaboración establecida entre Ayuntamiento de Santa Marta de Tormes y la Congregación de la Misión de San Vicente de Paúl.

Cabe recordar que este acuerdo, firmado hace unos meses, las familias podrán residir en la Congregación durante 90 días. Para que las familias puedan acogerse a esta ayuda tendrán que ser mayores de edad (o menores emancipados o con cargas familiares) o familias en las que haya recaído una orden judicial de desahucio de su vivienda habitual, o estén en riesgo de obtenerla y que no tengan alternativa de otra vivienda, siempre que estén empadronados en el municipio de Santa Marta de Tormes, con un antigüedad mínima de 6 meses, contados desde la presentación de la solicitud y acrediten unos ingresos económicos insuficientes de las personas o familias que accedan a este servicio.
La concejal del área, Andrea García, quiso matizar asimismo que serán los Servicios Sociales del Ayuntamiento los que realicen una valoración de la situación y elabore un informe al respecto. En este se reflejará la situación socioeconómica de la persona solicitante o familia, haciendo constar y teniendo en cuenta, la inexistencia y/o insuficiencia de ingresos para acceder a una vivienda, en el momento de la solicitud, además de la concesión o desestimación de otras ayudas sociales destinadas a personas o familias en riesgo de desahucio que hayan supuesto aporte económico a tal efecto.
Las familias que deseen alojarse aquí podrán hacerlo en régimen de pensión completa, entre los 350 euros de las familias de dos miembros, los 450 de las de tres miembros y los 550 de las de cuatro miembros, un pago que realizará el Ayuntamiento.
Los Padres Paúles han establecido para ello unas condiciones de utilización, que giran en torno al uso correcto de las instalaciones, de tal manera que el comportamiento de los nuevos inquilinos no perturbe la convivencia con los Padres que viven en la comunidad. El lugar reservado para estos vecinos será la llamada Casa de Hermanas, en el Centro de Espiritualidad, donde podrán vivir en habitaciones y espacios que en cada caso se les asignen. A este respecto los horarios de comida serán los mismos que los que tiene la Comunidad.
Las solicitudes se podrán presentar hasta el 31 de diciembre de este año.